RIGOBERTO URAN ES TERCERO EN EL TOUR DE FRANCIA

El pedalista colombiano finalizó en la quinta posición en la fracción 18 de la Grande Boucle. Darwin Atapuma fue segundo en la etapa.

Las difíciles rampas del Izoard fueron testigo de una batalla por la clasifciación general del Tour de Francia. Chris Froome, Rigoberto Urán y Romain Bardet se mostraron los dientes en busca de sacar diferencias en una tabla que está cerrada, que al inicio de esta fracción los separaba por solo 27 segundos. Un suspiro. Fue en los últimos kilómetros donde se definió todo Bardet atacó y terminó tercero. Bonificó y recuperó el segundo puesto en la clasificación general. Rigo pasó en la quinta posición por detrás de Froome, quien se mantiene líder de la competencia.

Warren Barguil, quien en esta etapa se coronó campeón virtual de la montaña -a la espera de finalizar el Tour en París-, fue el ganador de la etapa 18. El francés se impuso sobre el colombiano Darwin Atapuma, que tuvo una etapa notable. Quizo hacer historia en el día de la independencia de Colombia, pero le faltaron fuerzas al final para rematar. Fue superado por Barguil en el último kilómetro. "Intentamos hasta al final. Dejé todas las fuerzas enn la bicicleta. Estoy feliz con el segundo puesto", dijo el nariñense tras finalizar la etapa.

El Izoard puso a prueba a los favoritos para ganar el Tour de Francia. Los exigió hasta el final. Cada ataque parecía un golpe a la humanidad del ciclista. Las piernas sufrieron todos los arranconazos que se dieron. Fue una batalla mental y física que dejó como al gran ganador a Bardet, quien recuperó la segunda posición. Rigoberto Urán perdió dos segundos con Froome. "Fue una etapa dura. Se cumplió. Se perdieron segundos con Bardet, pero esperamos recuperar en la contrarreloj", resaltó el pedalista antioqueño. 

Fabio Aru fue el que más sufrió este premio fuera de categoría. El italiano lo había destacado como el más difícil de esta edición del Tour. Lo puso por encima del Galibier. Y fue así. En el ascenso vio perder cualquier posibilidad por retomar la camiseta amarilla del líder. Solo le queda la contrarreloj individual del sábado para intentar volver a ingresar al top-3 de la clasificación general. Perdió un minuto 22 segundos en la línea de meta. Se ubica quinto a 1:26 del podio. 

A falta de una etapa de transición y de la crono del sábado en Marsella, Chris Froome ya tiene París y su cuarto título a tiro. No ganó la prestigiosa etapa del Izoard, pero los 23 segundos sobre Bardet y los 29 respecto a Urán deben ser suficientes para ir entonando la canción de la victoria. Era la jornada del "ahora o nunca", una final para todo tipo de aspiraciones. De entrada se marcharon 54 corredores que poco a poco se fueron filtrando a medida que se acercaba el Izoard. La fuga se formó camino de la Cota des Demoiselles Coiffées (De las Señoritas Peinadas), donde la diferencia empezó a crecer hasta alcanzar los 9 minutos.

En el ascenso al Col de Vars (1ª, 9.3 kms al 7,7 por ciento) el Ag2r tomó el mando mostrando sus cartas para la hora de la verdad. Seguía la escapada, con Gallopin, Atapuma, Sicard y Lutsenko en cabeza por la cima. En el descenso se unieron Hardy, Edet, Navarro y Grmay. Pero las primeras rampas del Izoard, que ofrecía la tercera meta más elevada de la historia tras el Granon (1986) y el Galibier (2011), cambió la cara de la etapa. Los 14 kilómetros hacia la cima del coloso del Tour, a más de 2.300 metros de altitud, abrieron sus puertas al último espectáculo en la lucha por la etapa, el podio y la general.

El primero en atacar fue el kazajo Lutsenko, alcanzado por Atapuma, lanzado hacia la gloria, empeñado en celebrar con victoria el Día Nacional de Colombia. Pero la mala suerte de ambos fue la reacción de un cohete llamado Warren Barguil, quien tras alcanzarlos atacó para no volver a 2 de meta. Por detrás, en la refriega de los gallos, el Sky ordenaba y mandaba a su antojo hasta que Dan Martin decidió saltar las alarmas. Algo poco preocupante en comparación con el hachazo de Landa a 4,5. El español dejó a Froome solo con Bardet y Urán, a su criterio, en busca de la etapa, y con la idea de forzar los ataques de los enemigos

Todos reaccionaron, de manera que alcanzaron a Landa, quien había tenido sus minutos de gloria. El turno de Froome se esperaba. A 2.500 metros de la cima el líder conectó el molinillo, en una zona lunar, similar al Mont Ventoux, donde la vegetación ni se imagina. El cambio de ritmo de "Froomy" no soltó a sus rivales, excepto a Aru, que sufría descolgado. Y sin embargo, sirvió para neutralizar el despegue de Landa.

Con los ilustres juntos, resolución al esprint. Quien lo iba a pensar en el Izoard. Pues sucedió. Combate nulo. Froome de amarillo, paso de gigante, y Bardet, por dos segundos, quitó el segundo puesto a Urán. Días de mucho, víspera de nada. La fiesta en el Izoard la celebró Barguil. Doblete para el ciclista de Hannebont, ya con 2 etapas en el Tour y otras 2 en la Vuelta en su palmarés. Tiene futuro el ganador del Tour del Porvenir 2012, quien se desquitó además de la etapa que Atapuma le birló en la Vuelta a Suiza 2016 en los últimos metros. Como hoy, pero el revés. Este viernes se disputará la decimonovena etapa, entre Embrun y Salon-De-Provence, con un recorrido de 222,5 kilómetros.