Luego de tres años y cinco meses de reclusión en la cárcel militar de Ramo Verde, el dirigente político Leopoldo López fue trasladado a su casa en Caracas la madrugada de este sábado, luego de otorgarle la Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) venezolano el beneficio jurídico de arresto domiciliario o “casa por cárcel”. Allí se encuentra recluido ahora y con un brazalete electrónico para registrar su ubicación.
Por medio de una nota de prensa, el TSJ aseguró que tomó la decisión “en virtud de que existían serios señalamientos de irregularidades sobre la distribución del expediente (…) así mismo y en virtud de información recibida sobre la situación de salud del dirigente político”.
Pero, el mismo López echó por tierra esa explicación al mostrarse pleno de energía y sonriente ante decenas de ciudadanos, líderes políticos y periodistas que se reunieron a las puertas de su casa tan pronto se supo de su traslado. Con una bandera venezolana en la mano y muy sonriente levantó el puño y gritó los lemas de su acción política de los últimos años: ‘¡Sí se puede!’ y ‘¡Fuerza y fe!’
La imagen se viralizó al mismo tiempo que el mensaje que transmitió a sus seguidores a través de Freddy Guevara, segundo al mando del partido Voluntad Popular y vicepresidente de la Asamblea Nacional. “No estoy dispuesto a claudicar en mi lucha por la libertad de Venezuela, y, si ello implica que deba volver a Ramo Verde, estoy dispuesto a hacerlo”, dice el mensaje de López, quien también pidió a la oposición tomar de nuevo este domingo las calles de Caracas y participar en el plebiscito contra la constituyente. “Hoy estoy preso en mi casa, pero también está así el pueblo de Venezuela”.
Calmar y negociar
Aunque el TSJ aseguró que se trató de una “medida humanitaria”, el resto de la vocería gubernamental fue inconsistente y dispersa al explicar la decisión de beneficiar a quien ha llamado constantemente “asesino” y “el monstruo de Ramo Verde”.
Mientras el defensor del pueblo aseguró que la medida fue solicitada por Lilian Tintori y que “no debe verse como un hecho excepcional”, el ministro de Comunicación e Información, Ernesto Villegas, señaló que la “casa por cárcel” fue una recomendación de la comisión de la verdad que estudió las protestas de 2014 y en la que no participó la oposición. Por su parte, el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino, dio la explicación más política al asegurar que “producto de la tolerancia, el diálogo y la altura política del líder de la ‘revolución bolivariana’ y Presidente de la República, se han logrado estos hechos”.
“Ojalá esta medida (...) sea entendida y el señor L. L. (así se refirió a López), después de casi cuatro años en Ramo Verde, lance un mensaje de rectificación y de paz, porque el país quiere paz”, dijo Maduro en un acto público.
El otorgamiento de la “casa por cárcel” a López coincide con uno de los momentos más delicados de la historia del país, cuando se cumple el día 100 de la fuerte ola de protestas contra el Gobierno, en las que han sido asesinadas 91 personas, miles han sido lesionadas y por lo menos 3.500, aprehendidas. También después del asalto del martes pasado contra la Asamblea Nacional por bandas armadas del chavismo que hirieron a por lo menos 12 personas.
Ha sido un gran triunfo de las fuerzas opositoras, muestra que ha sido efectiva la protesta no violenta
En ese contexto, la decisión de favorecer a López se interpreta como un intento del régimen encabezado por Maduro de amainar la protesta interna y recuperar credibilidad ante la comunidad internacional. Pero, el efecto político real de esta decisión aún está por verse.
“Lo primero que puede decirse es que ha sido un gran triunfo de las fuerzas opositoras, muestra que ha sido efectiva la protesta no violenta, así como la dirección política que la acompaña, y no puede desdeñarse el impacto que ha tenido en el Gobierno las últimas actuaciones de la fiscal general”, dijo para EL TIEMPO la historiadora y analista Margarita López Maya. “López era el preso más caro del Gobierno, y este tuvo que ceder. Esto es una señal de que el Gobierno se ha debilitado, de que está buscando algún tipo de oxígeno político y empezó a buscar alguna negociación”, agregó.
Esta semana estuvo en Caracas el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, quien a comienzos de junio se había reunido con López en su celda junto con la canciller Delcy Rodríguez, lo que generó rumores sobre negociaciones entre el Gobierno y el dirigente político. En ese momento, su esposa ratificó que a López se le ofreció la posibilidad de salir al exilio, pero este no aceptó y no aceptaría alguna fórmula de liberación en la que no estuvieran incluidos el resto de los presos políticos.
Pero, esta vez el abogado español del dirigente, Javier Cremades, el primero en dar la noticia en Twitter, señaló que López no hizo compromisos con Maduro para obtener este beneficio. “Sin precio por parte de Leo”, escribió el abogado tras señalar que la medida no modifica la condena de López de 13 años y 9 meses de prisión.
También el partido político fundado por López, Voluntad Popular, enfatizó que la medida correspondió a una “decisión unilateral del Estado venezolano”.
El llamado a seguir en las calles hecho por López y ratificado por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) busca demostrar que la dirigencia opositora no se comprometió a suspender las protestas. Falta ver el ánimo de los venezolanos a seguir en la lucha.
“Este triunfo parcial debe ser para todos un estímulo para no solo continuar sino intensificar la lucha democrática y pacífica que hemos venido sosteniendo, y que tendrá una nueva dimensión a partir del próximo domingo 16, en lo que va a ser el histórico ‘proceso nacional de decisión soberana’ ”, dijo la MUD en un comunicado.
El encarcelamiento de López en la prisión militar de Ramo Verde estuvo plagado de todo tipo de irregularidades y tratos crueles que fueron denunciados decenas de veces por sus familiares y abogados, como el robo de sus pertenencias, requisas nocturnas y la grabación de todas sus conversaciones. El más recurrente de los castigos era su aislamiento total, encerrado lejos del resto de la población penal y con la veto de recibir visitas, sin motivo alguno. Hasta este sábado, López estuvo tres meses sin tener contactos con sus abogados y 32 días con su familia.
(Tomado de El Tiempo)
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